Estar siempre conectado se ha convertido en algo primordial para los viajeros de empresa. Pero hay que tener cuidado con cómo se accede a Internet, o nos podríamos encontrar con sorpresas desagradables.
Como ya explicamos hace algunas semanas en otro artículo de este blog, son cada vez más las compañías aéreas que ofrecen conexión WIFI a sus pasajeros durante los vuelos, y este servicio es especialmente importante para los viajeros de negocios para poder seguir trabajando correctamente durante sus traslados. Pero la mayoría de estas aerolíneas no lo ofrecen de forma gratuita, y en algunos casos la tarifa puede llegar a ser muy alta.
El CEO de Trend Hunter, Jeremy Gutsche, de Canadá, lo comprobó de primera mano cuando decidió probar el WIFI ofrecido por Singapore Airlines durante un vuelo realizado a mediados de noviembre pasado, de Singapur a Londres. La sorpresa del empresario fue muy grande cuando le llegó la factura por este servicio de casi 1.200 dólares.
El canadiense relató su experiencia en su blog, donde declara que su uso de Internet no fue para nada excesivo, ya que se dedicó a enviar unos cuantos correos electrónicos, descargar un power point y visitar 155 páginas webs. Además, afirma que la conexión era tan lenta que ni siquiera podría haber reproducido ningún tipo de vídeo, por lo que además de caro, el servicio le pareció de muy baja calidad.
El inicio de sesión en esta aerolínea supone un cobro de 28,99 dólares, que incluye solamente 30 MB de descarga de datos. Gutsche relata que, si bien las tarifas estaban claramente indicadas, se quedó dormido sin saber que su dispositivo quedaba conectado, puesto que no se desconectaba automáticamente al alcanzar el total del consumo contratado. Así pues, el sobrecoste correspondía con los gastos suplementarios derivados de eso, una factura total de 1.171, 46 dólares, equivalentes a aproximadamente 950 euros.