Las herramientas de Business Intelligence siguen ampliando sus funcionalidades para ayudar a las empresas a tomar mejor y más rápido sus decisiones. Una de las facetas de estas herramientas es detectar y responder las cuestiones claves que permitan detectar puntos de mejora en los procesos de negocio y ahorrar costes en la empresa.
Según Gartner, las herramientas de Business Intelligence son la prioridad número uno de los CIO en cuanto a la implantación de nuevas tecnologías alineadas con los objetivos estratégicos de negocio. Ser capaz de tomar decisiones fundamentadas -y acertadas- para reaccionar ante nuevas situaciones toma importancia en el mundo de la empresa. La flexibilidad y capacidad de respuesta permite sortear entornos inciertos como a los que muchas empresas se enfrentan.
El panorama ha cambiado, muchas empresas ya no sufren de falta de datos que analizar sino que se ven inmersos en una marea de la que son incapaces de extraer la información realmente valiosa para su negocio.
Las herramientas de Business Intelligence ofrecen a las empresas la posibilidad de decidir en base a información real extraída de su datos de negocio, de una forma más rápida y justificada para incrementar beneficios, mejorar el servicio al cliente y controlar costes. Ponen orden y dan sentido a la infinidad de datos que en la mayoría de casos se almacenan en los sistemas de datos de la empresa: bases de datos operacionales, data warehouses o data marts.
Las nuevas tendencias en este campo incluyen herramientas más flexibles y con dashboards cada vez más sofisticados, poniendo énfasis en encontrar las métricas importantes para cada caso y permitiendo mayor incorporar nuevas fuentes de datos y personalizar el sistema incluso sin la ayuda del departamento técnico.
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