Tener el control sobre los gastos de la empresa es básico en cualquier empresa que quiera ser eficiente. De lo contrario, aunque la facturación sea buena, la empresa puede llegar a tener problemas de rentabilidad. Por eso, te presentamos cinco consejos que te ayudarán a tener cada céntimo gastado bajo control.
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Presupuesto
Es importante tener un presupuestoestablecido mes a mes. Todas las partidas tienen que estar presentes, lo más detalladas posibles, para saber exactamente cuánto y en qué está previsto gastarse el dinero. Tiene que ser realista, y la empresa y sus empleados se tienen que esforzar por no sobrepasarlo.
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Concienciación
En la reducción de gastos y optimización de costes, toda la empresa está involucrada. Esto significa que hay que lograr concienciar a los empleados, para que sean una ayuda en este proceso. Incluso se puede premiar o dar alguna motivación a los empleados que logren reducir gastos, que propongan ideas para aumentar la rentabilidad, etc.
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Negociar
No hay que tener miedo a negociar con todos los proveedores. Revisa los contratos periódicamente, las condiciones pactadas, y comprueba si se puede aplicar alguna mejora.
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Reporting
El reportinges imprescindible para lograr una mejor gestión de los gastos. Es decir, analizar los gastos, cuánto se gasta, en qué, quién hace los gastos, por qué, etc. Tener una contabilidad de costes es muy interesante, ya que nos da toda esta información que no se logra con la contabilidad financiera habitual. Pero para eso hay que disponer de herramientas que nos den estos datos, y poder analizarlos posteriormente. Existen herramientas tecnológicas, como Captio, que permiten hacer un reporting detallado de los gastos, y lograr así encontrar oportunidades de ahorro, gastos innecesarios, etc.
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Innovación
Siempre se puede mejorar. No te conformes con cómo está la gestión de gastos actualmente y busca siempre activamente nuevas maneras de optimizar gastos. En este sentido, no está de más estar al día de las novedades tecnológicas, como comentábamos antes, que permiten reducir costes. También puedes buscar nuevas subvenciones o bonificaciones fiscales, nuevos proveedores, etc.
