Las novedades Fintech están cambiando muy rápidamente el sector financiero a nivel mundial y, quizás a un ritmo un poco más lento, el de nuestro país. Pero se trata de un cambio real, que afecta a la forma de gestionar y controlar las finanzas de las empresas: cada vez menos a través del papel y más de forma digital, con más inmediatez y menos intermediación.
Hay que decir que se trata de un cambio generalizado de las nuevas tecnologías, no solamente de las finanzas. Es un cambio real, esto está claro. Este cambio se está produciendo en todos los ámbitos, no solamente en el de las finanzas. En la prensa, por ejemplo, los medios de comunicación tienen que afrontar la realidad de la digitalización de los soportes y adaptarse a él. Lo mismo ocurre con las finanzas. Se trabaja con menos papel y más frente a una pantalla.
La reacción de muchas empresas españolas a este nuevo paradigma a veces está tardando en llegar, aunque tarde o temprano se tendrán que adaptar y avanzar de forma más decidida hacia la adopción de este tipo de productos y servicios. En este sentido, algunos expertos entrevén varias formas en las que este cambio puede ser impulsado.
Una de las posibles vías es la regulación de la Administración. En otros procesos, como las facturas electrónica, se ha establecido en nuestro país obligatoriedades bajo ciertos requisitos que hacen que las empresas tengan que adaptarse sí o sí. Otro ejemplo es el SII, que entrará en vigor en 2017 y obligará a determinadas empresas a declarar sus facturas en un periodo máximo de 4 días laborales.
Existe otro factor importante como vía de impulso: el efecto contagio. En muchos países la utilización de Fintech ha pasado a ser sistemática y “normal”. Por esto, una forma muy probable y viable de implantación de Fintech en las empresas es por este efecto arrastre. Con las multinacionales extranjeras con sede en nuestro país, la adaptación de soluciones Fintech se va a imponer, va a llegar por contagio. Lo que se ve como normal en esos países se normalizará en nuestro país también.
Además, hay que tener en cuenta que el factor precio parece que jugará un papel imortante para que las sociedades españolas adopten estas tecnologías más masivamente. Con una tasa de penetración cada vez más alta, es previsible que se produzca poco a poco una bajada de precios. Esto ayudará a muchas empresas a decidirse a dar el paso hacia la tecnología Fintech.