La Red Iberioamericana para la Sustentabilidad en los eventos, ReInspira, reúne expertos del sector de la organización de eventos y analiza la importancia de la accesibilidad en el turismo de reuniones.
Expertos de la organización de eventos han señalado la importancia de la accesibilidad para organizar eventos de empresa, y por tanto, el requisito de atender las necesidades de las personas con cualquier tipo de discapacidad.
“El organizador debe tratar a este tipo de visitantes como cualquier otro, aunque debe tener en cuenta sus necesidades específicas”. Así empezaba su conferencia el fundador y Marketing Manager de Barcelona Zero Limits, Julià Montero.
La accesibilidad en los eventos es para los expertos un “factor esencial, básico y fundamental a la hora de ponernos ‘manos a la obra’ desde el minuto cero en que afrontamos la responsabilidad de organizar cualquier tipo de evento, pues de ello dependerá hacer ‘mejores eventos’ y ‘para todos’.
Por su parte, el jefe de Protocolo de la ONCE, Javier Aguado, destacó la importancia de concienciar más a los organizadores de eventos de la accesibilidad universal, “pues cualquiera de nosotros puede tener una discapacidad física por un día, por unas horas”.
En la línea de la necesidad de diseñar los eventos con criterios accesibles para que sean “eventos para todos” Montero se apoyaba en la idea de que los profesionales deben afrontar este reto con total normalidad, y no como eventos especiales.
Otro de los puntos más importantes destacado fue el elevado número de personas con movilidad reducida (PMR) que asisten a grandes eventos. Por ejemplo, en el Mobile World Congress se contabiliza hasta un total de 500 asistentes que corresponden a esta tipología de visitantes.
Montero también destacó que “precisamente, los eventos que sí cuentan con elementos accesibles disfrutan de unos excelentes prescriptores de buenas prácticas por parte de las personas con movilidad reducida”. Según Montero, esto es un plus para el evento y lo posiciona mejor en el sector.
Por ello, cabe resaltar la importancia de adaptar el acto a cualquier discapacidad que pueda influir en acceder, interactuar o intervenir con normalidad. Por ejemplo, hay que tener en cuenta aquellos visitantes que tienen problemas de audición facilitando intérpretes de signos, a los que tienen problemas de visión con programas o resúmenes de las intervenciones en braile; hay que contemplar las rampas de acceso, los sillones desmontables, la anchura suficiente de los pasillos o las instalaciones accesibles.
Por último, en la reunión también se señaló la importancia de las “guías de accesibilidad” de los espacios para eventos, ya que se trata de una herramienta muy útil para que el asistente sepa de antemano qué se va a encontrar al acudir al evento.
