Los expertos llegan a la conclusión de que para crecer en el entorno corporativo es necesario tener la mejor información. Y eso significa abrazar el Business Intelligence en la mayor medida posible. Porque así es como cualquier negocio puede tener las posibilidades necesarias a la hora de crecer tomando las mejores decisiones.
Este término tan fundamental en el entorno actual de las empresas, también conocido como Inteligencia Empresarial, nos lleva a realizar un proceso que se fundamenta alrededor de cinco fases: recolección de información, organización de la misma, análisis, compartición y monitorización. Si la información de una empresa pasa por este proceso completo proporcionará el mejor rendimiento a la compañía y se podrá evolucionar de forma significativa, incluso por encima de la competencia.
El resultado de un proceso complejo
Con los datos que se obtienen de sacar provecho al BI las empresas pueden obtener información muy valiosa que llevará a que se puedan definir las soluciones necesarias en la empresa para crecer. Este proceso forma parte de una planificación estratégica adecuada que permita que las empresas fomenten sus aspectos más positivos, que refuercen aquellos que se encuentran por detrás de lo esperado y que transformen sus debilidades en ventajas. El Business Intelligence tiene otras aplicaciones que se encuentran relacionadas, dado que su uso también permite saber hasta qué punto las herramientas que se están usando en la empresa están proporcionando unos resultados adecuados. Lo mismo se puede aplicar a acciones determinadas, ayudando así a pulir los procesos que se gestionan dentro del negocio.
Al exprimir la información obtenida habrá otras tareas que se podrán aprovechar, como la identificación de tendencias que puedan resultar beneficiosas, el análisis de los resultados de una manera más exhaustiva y la anticipación de posibles riesgos que pongan en peligro el rendimiento de la compañía. Prácticamente no hay departamento en la empresa que no pueda obtener unas claras ventajas de aplicar el BI y los sistemas de información en su día a día, desde el marketing hasta la división de ventas o el de planificación. Por eso es tan importante comenzar a utilizarlo lo antes posible para ver cómo la empresa alcanza sus verdaderos niveles de rendimiento.
La estrategia BI en los gastos de viajes
Para una gran cantidad de empresas los gastos de viajes son fundamentales, puesto que ejecutivos y especialistas de diversos departamentos tienden a moverse entre distintos destinos para visitar a sus clientes. Por ello es importante que cuando se introduzca la estrategia de Business Intelligence también se tenga en cuenta la actividad que se realiza en estos viajes y en especial teniendo los gastos como factor de referencia principal. Al estudiar esta información vamos a tener la posibilidad de aprender de cuáles son los focos de gastos principales y cómo podemos reducirlos o mejorarlos de manera que en los próximos viajes el presupuesto se reduzca de forma considerable.
En este sentido se puede comenzar aplicando el BI a la contabilización de un grupo de gastos que raramente no están presentes en un viaje de empresa, como el kilometraje de los desplazamientos, las dietas, los gastos generales que se realizan con la tarjeta de crédito de la empresa y las tasas de alojamiento. Comprender y analizar esta información a través del proceso que hemos detallado antes ayudará a mejorar en los resultados del negocio.
Potenciando la fuerza de ventas
Otro departamento que coincide en las grandes ventajas que tiene el BI para el mismo es el correspondiente a la fuerza de ventas. En su contexto es muy recomendable el acceso y la descarga de la guía gratuita “Transformación Digital en la fuerza de ventas: BI móvil para el comercial 4.0”, que responde a todas las dudas que puedan surgir a la hora de aprovechar estos recursos.
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Business Intelligence y Gestión de la Información
